Hoy día el grupo lo constituyen 25 cooperativas base, es decir de primer grado, y engloba un total de 15 bodegas de vino, 10 almazaras de aceite, 9 entamadoras de aceitunas de mesa, un concentrador de mosto, una gestora de subproductos vínicos y laboratorios con los últimos avances tecnológicos, además de líneas de envasado de vino y de aceite.

Esto permite a Viñaoliva gestionar sus productos a granel y el de sus cooperativas socias a la medida de las exigencias de los clientes nacionales e internacionales. Esa es la principal ventaja competitiva, que consiste en poder concentrar toda la oferta en un solo lugar. Por consiguiente, el cliente, cuando llega a Viñaoliva tiene acceso a todos los vinos y aceites de oliva virgen extra de todas las cooperativas socias sin tener que desplazarse.

Otra de las ventajas del grupo Viñaoliva reside en que es el mayor productor de vino de Extremadura, pudiendo acceder a mercados exteriores para no depender del mercado interior, y lo ha hecho posible gracias a que siempre aporta un valor añadido al producto para acceder a mejores oportunidades de cara a sus socios. Por lo tanto, antes de recibir al comprador ya se tiene muy claro lo que este está demandando. Esto se logra gracias a que el grupo Viñaoliva cuenta con varios profesionales expertos capaces de identificar lo que demanda el mercado además de un equipo enólogo que elabora el tipo de vino que el cliente exige para que esa anticipación de carácter comercial sea más afinada.